La malesa en el cesped.

Es confuso pero al final del día normalmente no apreciamos las pequeñas migajas que logramos esconder de aves carroñeras que intentan quitarnos esos buenos momentos con el único fin de quedárselos y fomentar el egoísmo y consumismo excesivo, olor común que emite nuestra tan materialista sociedad actual que nos impulsa a un estado sin equilibrio en donde nos vemos bloqueados por lo que nos programan desde pequeños cuando nuestras mentes inocentes están listas para ser moldeadas. Reglas, normas, prejuicios que de la nada existieron o eso nos decimos porque nadie quiere aceptar al responsabilidad de lo que en conjunto hemos creado. Y aunque ya no hay forma de dar vuelta al reloj y junto con los minutos borrados nuestros mas bajos actos, no hay necesidad de creer que todo esta perdido, lo único que sucede es que los que intentan arreglar lo que sus antepasados arruinaron son tratados como malesa que debe ser eliminada por el bien del césped. Si nos detenemos a pensar un momento podremos recordar muchos errores cometidos, lo mejor seria es que en lugar de pensar en ellos intentáramos que no vuelvan a repetirse en una suerte de dejavu.